miércoles, 18 de mayo de 2011

Derechos Sobre Propiedad Intelectual en las Futuras Semillas Chilenas

“… Si somos americanos,
no miraremos fronteras,
cuidaremos las semillas,
miraremos las banderas…”
Si Somos Americanos
Rolando Alarcón


Las opiniones son divergentes, hay personas que están a favor de la producción de los cultivos transgénicos, ya que los ven como “la fórmula” para potenciar la agricultura, no obstante, para otros, constituye un peligro para la salud y la biodiversidad.
A mi parecer es necesario tener una opinión al respecto, y para poder decir con autoridad si uno se encuentra a favor o en contra de los cultivos transgénicos es necesario informarse.
Se habla mucho de los transgénicos, pero a mi parecer, a nivel general no se sabe, o no se tiene muy claro que es un organismo transgénico, cual es su importancia y cuál es la situación en Chile.
No siendo experta en la materia, les puedo comentar que un organismo transgénico es, un organismo genéticamente modificado a través de la ingeniería genética, en palabras sencillas, es aquel alimento (A) al cual se le incorporó genes de otro organismo (B), con el fin de producir características específicas de (B) en (a), por ejemplo, incremento de productividad, resistencia a plagas, resistencia a herbicidas, resistencias al frío, resistencia a la sequía, etc.
Por lo tanto, no es lo mismo que la “domesticación” (proceso por el cual se selecciona un individuo que presenta características determinadas y se multiplica a modo de conseguir una variedad determinada, con características específicas y deseadas).


No todo es color de rosas

Algunos de los puntos más importantes evaluados por los detractores:

1.    La producción de este tipo de alimentos involucra daños a la salud.
El estado de la salud del agricultor, principalmente con la aparición de alergias, además con respecto al cambio del perfil nutricional, dilución del acervo energético y difusión de resistencias a antibióticos.

Resistencia a antibióticos: en muchos de los casos la inserción del ADN foráneo se hace a través de “marcadores de resistencia a antibióticos”.
Desde 1998 la FDA exige que la industria genere plantas sin este tipo de marcadores en el producto final, sin embargo, para los detractores la preocupación radica a que en el proceso podría ocurrir una “transferencia horizontal” de estos genes a otras especies, como por ejemplo, a las bacterias presentes en el suelo (rizosfera), o las presente en el intestino de animales y humanos, pudiendo dar lugar a la aparición de resistencias a bacterias patógenas de importancia clínica.

Las personas que están a favor de este tipo de organismos argumentan que existen muchos elementos que limitan la transferencia de ADN del producto transgénico a otros organismos, por ejemplo que el consumo del alimento degrada el ADN por medio del proceso de digestión, por otro lado, las bacterias del medio ambiente tienen mecanismos especiales para mantener su estabilidad genética, como enzimas de restricción que degradan el ADN que podría transformarlas, no llegando a ser afectadas por este ADN exógeno.

Experiencias científicas han demostrado en ratones que el “M13 ADN” se ha encontrado en fluidos sanguíneos, e incluso se ha observado su paso a través de la barrera placentaria. Además, se ha demostrado que el “gen epsps” de soya transgénica sigue intacto en el intestino.

También se ha discutido el posible efecto alergénico de estos Organismos Genéticamente Modificados (OGM), ya que un alimento “supuestamente inocuo” podría presentar reacciones alérgicas en individuos susceptibles al ADN exógeno.
Hay otros estudios que le adjudican cierta toxicidad a los productos transgénicos, provocando un errático accionar de la actividad hepática, pancreática y testicular.

2.  La producción de este tipo de alimentos involucra daños ambientales, a través de la contaminación bacterial y por el polén.
El estado medioambiental del ecosistema aledaño al cultivo. La producción de cultivos transgénicos afecta a la biodiversidad y el sello natural y de origen del país, y pone en peligro  a la agricultura orgánica a través de la contaminación de sus semillas.

3.   La producción de este tipo de alimentos involucra daños económicos, sociales y problemas legales y éticos.
Los OGM tienen derechos de propiedad intelectual y/o patentes, las cuales deben ser canceladas al propietario creador de dicho organismo o alimento transgénico, por otro lado, muchos de los organismos modificados poseen una inhibición de la germinación de las semillas de ese OGM, impidiendo la obtención de semillas directamente de las plantas transgénicas (práctica muy habitual por los agricultores).

La opinión de la FAO de los alimentos genéticamente modificados:
“Hasta la fecha, los países en los que se han introducido cultivos transgénicos en los campos no han observado daños notables para la salud o el medio ambiente. Además, los granjeros usan menos pesticidas o pesticidas menos tóxicos, reduciendo así la contaminación de los suministros de agua y los daños sobre la salud de los trabajadores, permitiendo también la vuelta a los campos de los insectos benéficos. Algunas de las preocupaciones relacionadas con el flujo de genes y la resistencia de plagas se han abordado gracias a nuevas técnicas de ingeniería genética.
Sin embargo, que no se hayan observado efectos negativos no significa que no puedan suceder. Los científicos piden una prudente valoración caso a caso de cada producto o proceso antes de su difusión, para afrontar las preocupaciones legítimas de seguridad.”

La opinión de la OMS (Organización Mundial de la Salud)
“Los diferentes organismos OGM (organismo genéticamente modificados) incluyen genes diferentes insertados en formas diferentes. Esto significa que cada alimento GM (genéticamente modificado) y su inocuidad deben ser evaluados individualmente, y que no es posible hacer afirmaciones generales sobre la inocuidad de todos los alimentos GM. Los alimentos GM actualmente disponibles en el mercado internacional han pasado las evaluaciones de riesgo y no es probable que presenten riesgos para la salud humana. Además, no se han demostrado efectos sobre la salud humana como resultado del consumo de dichos alimentos por la población general en los países donde fueron aprobados. El uso continuo de evaluaciones de riesgo según los principios del Codex y, donde corresponda, incluyendo el monitoreo post comercialización, debe formar la base para evaluar la inocuidad de los alimentos GM.”

Hay diversos grupos opuestos a los alimentos transgénicos (ecologistas, algunos científicos, políticos, asociaciones de derechos del consumidor, etc.) donde se exige, como medida N° 1 el etiquetaje de los alimentos, de esta forma poder discriminar entre un alimento transgénico y uno no modificado genéticamente.

¿Qué pasa en Chile?

Desde 1996 hasta comienzos de este año Chile, permitía solo la producción de semillas para exportar (no para consumo interno), sin embargo, el actual Gobierno reimpulsó la iniciativa legal para abrir el mercado a esta “nueva tecnología”. Ese mismo año Chile adhirió a la organización intergubernamental Unión Internacional para la Protección de Obtenciones Vegetales (UPOV); donde regía la UPOV 1978.

En Chile hay alrededor de 20 mil hectáreas con este tipo de siembras, pero la ley no obliga a indicar la ubicación exacta de estos cultivos, ya que de esta forma se “protege” la propiedad intelectual y se evitan ataques por parte de detractores.

El año 2006 se presentó un proyecto de ley sobre bioseguridad de Vegetales Genéticamente Modificados (CGM) por parte de los senadores en ejercicio Alberto Espina (RN), Andrés Allamand (RN), Juan Antonio Coloma (UDI), Eduardo Frei (DC) y Fernando Flores (Chile Primero).
Esta iniciativa permitía el cultivo y la comercialización de organismos transgénicos en el país. Luego de dos años fue aprobado en primer trámite por el Senado, sin embargo, ese mismo año, el proyecto quedó con su trámite congelado.
En marzo de este año, el Ministerio de Agricultura envió una indicación sustitutiva firmada por: José Antonio Galilea (Ministro de Agricultura), Juan Andrés Fontaine (M. de Economía), María Ignacia Benítez (M. de Medio Ambiente), Jaime Mañalich (M. de Salud) y por el Presidente, Sebastián Piñera, cuyo objetivo es entregar a los agricultores herramientas competitivas para que la producción se equipare a países como Argentina, Canadá y Estados Unidos, por ejemplo, abaratando costos de producción (por lo menos un 5%).
El 17 de abril de 2011 la iniciativa comenzó a ser revisada de manera conjunta por la comisión de Agricultura, Medio Ambiente y Salud.
La semana pasada la cámara Alta aprobó por mayoría la UPOV 91, que corresponde a la última actualización de la UPOV (13 votos a favor, 5 en contra y 6 abstenciones), y ahora será enviado al Presidente para que lo ratifique (fue aprobado por las comisiones de agricultura y de relaciones Exteriores).
Lamentablemente esto pasó casi inadvertido producto a que los medios de comunicación  estaban centrados fuertemente en las movilizaciones en contra de Hidroaysen, sin producirse un debate a la altura que se merece un tema tan importante como éste.

Resumen de las votaciones:
A favor: Carlos Cantero (Antofagasta, Independiente), Francisco Chahuán (Valparaíso, RN), Alberto Espina (Araucanía, RN), José García (Araucanía, RN), Carlos Kuschel (Los Lagos, RN), Carlos Larraín (Los Ríos, RN), Baldo Prokurica (Atacama, RN), Hernán Larraín (Maule, UDI) Juan Antonio Coloma (Maule, UDI), Pablo Longueira (Metropolitana, UDI), Jovino Novoa (Metropolitana, UDI), Jaime Orpis (Tarapacá, UDI) y Eugenio Tuma (Araucanía, PPD) .
Abstención: Antonio Horvath (Aysén, RN), Camilo Escalona (Los Lagos, PS), Juan Pablo Letelier (O’Higgins, PS), Hossain Sabag (Bío Bío, PDC), Patricio Walker (Aysén, PDC) y Andrés Zaldívar (Maule, PDC)
En contra: José Antonio Gómez (Antofagasta, PRSD), Jorge Pizarro (Coquimbo, PDC), Jaime Quintana (Araucanía, PPD), Ximena Rincón (Maule, PDC) y Alejandro Navarro (BíoBío, MAS)

El Senador José García Ruminot (RN) comentó que el UPOV 91 pertenece a una serie de instrumentos a nivel internacional que apuntan a proteger los derechos de autor y no afectará a los productores nacionales”, agregó que si Chile no se adhiere a este convenio puede ser sancionado por instancias internacionales, ya que los TLC con E.E.U.U., Japón y la U.E. así lo estipulan.
El Senador RN Carlos Larraín puntualizó que  “con la ratificación del proyecto no se verán afectados nuestros agricultores nacionales y no desaparecerán las especies nativas”.
Sin embargo todo lo anterior, tanto Brasil, como Argentina han adherido al UPOV 78, pero no al UPOV 91, sin que ello signifique o haya traído como consecuencia una sanción por la no adherencia.

Este convenio tiene diversos detractores ya que privatiza las semillas chilenas e impide que los productores campesinos, agricultores indígenas y rurales guarden semillas, rompiendo con la lógica del cultivo tradicional, y permite la venta a través de grandes transnacionales de semillas híbridas y transgénicas en el país.

En resumen, el Senado aprobó vender y/o entregar las patentes de todo tipo de semillas Chilenas a la empresa Norteamericana Monsanto (empresa peor evaluada en el mundo en el año 2010) y otras multinacionales…

domingo, 8 de mayo de 2011

Fuerte y Claro, No a las represas en Aysen!!!

… Vamos
A contener la Muerte!

Chilenos de hoy
Araucas de la lejanía,
Ahora,
Ahora mismo,
Ahora,
A detener el hambre de mañana,
A renovar la selva prometida,
El pan, futuro de la Patria Angosta.

Pablo Neruda (Oda a la Erosión de a Provincia de Malleco, fragmento)


La Negra cantaba “soy agua, playa, cielo, casa, planta, soy mar, Atlántico, viento y América, soy un montón de cosas santas, mezcladas con cosas humanas, como te explico. . . cosas mundanas”.
Me interpreta tan bien… porque soy y me siento parte del planeta, de Latinoamérica, de mi querido Chile, de mi hermosa Patagonia… Es por ello que estoy a favor de las energías renovables, de la agricultura ecológica, del turismo sustentable… en fin, de todo tipo de actividad donde se respete el medio que nos rodea, por lo tanto, no estoy a favor del proyecto megaenergético de Hidroaysén.
¿Cómo estarlo? Si se quieren construir 5 megarrepresas en las cuencas del río Baker y Pascua, cuya construcción provocará la inundación de 6.000 há. ¿Quién se hace responsable de los impactos negativos a la flora y fauna local?, ¿Qué sucederá con las actividades turísticas en la zona?, ¿con el turismo ecosustentable?, ¿tendremos el mismo atractivo después de las represas?, ¿quién mide los impactos culturales y sociales?...

Datos para tomar en cuenta:
  • -       5.900 hectáreas inundadas.
  • -       6 mil torres de alta tensión (cada 400 m)
  • -       Torres de hasta 70 metros de altura (equivale a un edificio de 20 a 25 pisos).
  • -       2.300 km de tendido eléctrico (Línea de transmisión).
  • -       Se debe despejar 100 m de ancho para instalar las torres, por lo tanto, 23.000 há. De total deforestación.
  • -       67 comunas estarán afectadas de manera directa.
  • -       Destrucción de más de 4,6 millones de há. del paisaje patagónico y de Chile Central.
  • -    Fragmentación de 6 parques nacionales, 11 reservas nacionales, 26 sitios prioritarios de conservación, 16 humedales y 32 áreas protegidas privadas.
  • -      Endesa y Colbún hoy alcanzan al 74% de la matriz en el SIC, con Hidroaysén llegarían a más del 90% del mercado (claramente un monopolio).
  • -     La estimación de energía renovable para el 2015 es de 4.402 MW (megavatios), y la estimación del ahorro energético a través de la eficiencia energética es de 2.740 MW. El total pronosticado asciende a 7.142 MW (31% de la capacidad instalada hacia el año 2025).
  • -       Hidroaysén producirá 2.750 MW, para entrar en operación entre los años 2015 y 2025.
  • -     El Estudio de Impacto ambiental (EIA) en el mes de noviembre de 2008 generó sobre 3.150 observaciones por parte de 36 servicios públicos y más de 4.000 observaciones ciudadanas.


Porqué SI a las represas en la Patagonia?
“El crecimiento de la economía chilena necesita de la energía de Hidroaysen”
Contrarespuesta:
El principal problema de la energía eléctrica en Chile es más bien de “transmisión”, y no de “generación”.
Actualmente existen numerosos proyectos de generación energética (las fijación de tarifas hacen más atrayente este tipo de inversiones), por lo que la demanda energética está cubierta hasta los próximos 15 años.

Porqué llegamos a esta situación en Chile?
Chile no tiene una política pública que priorice el desarrollo de energías renovables no convencionales, ni la eficiencia energética.
El país depende en un gran porcentaje de recursos energéticos importados.
El mercado energético en chile no tiene regulaciones y es intrínsecamente especulativo, constituyendo un monopolio eléctrico por parte de Endesa y Colbún.


La seguridad energética es una tarea de Estado, y un factor clave para el desarrollo del país.
Se necesita una política energética clara, donde exista una opinión respecto a tópicos que hoy por hoy se encentran en “tierra de nadie” (ejemplo, distancia entre punto de consumo y punto de generación de energía), y por sobre todo, se necesita de un ordenamiento territorial, donde el Estado genere zonas donde se priorice la generación energía, y no que las empresas tengan libre albedrío para utilizar el terreno que les parezca más conveniente, sin importar el ordenamiento del territorio.

Porqué SI a las energías renovables?
La política internacional se está haciendo parte de las “energías verdes”, por ejemplo, Obama propuso un aumento del 10% de energía eléctrica renovable para el 2012, con una meta del 25% para el año 2025. Se han otorgado subsidios para energía eólica, solar, geotérmica y a partir de biomasa, para favorecer el incremento en su utilización. La Unión Europea, en tanto, ha comunicado que alcanzarán la meta de 20% para 2020 en el sistema eléctrico de EU-27.
Es de esperar que éstas políticas incidan favorablemente en el crecimiento de los mercados de energías renovables, disminuyendo las brechas tecnológicas, lo que provocaría una disminución de los costos de generación de las mismas, expandiendo el mercado, y acelerando el desarrollo de estos recursos.
En Chile, algo se está haciendo al respecto… CORFO estableció un fondo para financiar las primeras etapas de proyectos hídricos, solares y geotermales de pequeña escala, y el 1° de abril de 2008 se aprobó la Ley 20.257 de Energías Renovables No Convencionales, donde se establece un mínimo de generación del 10% con energías renovables al 2025.
Chile tiene una gran cantidad de recursos geotérmicos y solares de la más alta calidad, es por ello que es absurdo que nos restemos a investigar y mejorar la extracción y uso de estos recursos.

Porqué No a Hidroaysén?
De acuerdo al escenario presentado hasta abril de 2008 (tomando en consideración los proyectos de energías renovables y las plantas de generación convencionales, sin considerar hidroaysén), la generación eléctrica estimada a 2025 supera en más del 20% la demanda eléctrica proyectada, por lo tanto, no se necesita la construcción de estás 5 represas!.
Porque las cosas en hidroaysén huelen mal, porque el EIA huele mal, porque no se tomo en cuenta a los ciudadanos, ni sus observaciones, porque hay mentiras, faltas a la verdad, adulteraciones, descalificaciones, falencias y omisiones en informes de evaluación de hidroaysén, y cuantas otras cosas más extrañas han pasado en este proceso.
Porqué me hace “ruido” que el hermano de la “primera dama” sea parte del directorio.
Porque tengo toda la impresión que la comisión de evaluación ambiental ha sufrido una fuerte presión – por cierto, no ciudadana - para aprobar este mega proyecto eléctrico.
Porqué el tendido eléctrico se presenta como un proyecto distinto al de la construcción de las represas, siendo que es obvio que ambos proyectos van juntos, que son total y absolutamente vinculantes, por lo que no se pueden evaluar de forma separada…
Porque hay que buscar otras soluciones a la demanda energética de la zona urbana y de las empresas mineras…
Porque es un proyecto totalmente ajeno, exógeno e intruso, porque no está acorde a la imagen que quiere proyectar la región de Aysén (privilegio ecológico).


Porque vasta que unos pocos se enriquezcan a costa del resto, de las comunidades locales, del ecosistema, de los sueños y de las esperanzas de muchos que queremos un mundo mejor!

Hay que poner en valor el enorme potencial del país en fuentes eólicas, solares, geotérmicas, mini hídricas, de biomasa… y el aumento de la capacidad física del sistema, no puede, ni debe ser la única alternativa para generar mayor electricidad.


 Sector El amarillo, Chaitén

Puerto chico, Puerto varas